La
mayoría de las personas viven hacia fuera, porque vivir hacia dentro
supone el reto más difícil, que es, hacerte responsable de lo que eres,
aceptarte y curarte las heridas con las que has elegido nacer para
aprender las lecciones de esta existencia. El verdadero fin, es nada más
y nada menos que SER. No es un trabajo fácil, ya que tienes que
renunciar a las creencias que te han inculcado, y dar luz a las verdades
que se encuentran dentro de ti. Algunas son incomodas, pero ahí está el
verdadero trabajo de cada persona que es aceptarse y evolucionar.
Dentro de nosotros está la luz y la oscuridad, lo masculino y lo
femenino. No existe dualidad, somos seres completos, y todxs somos una
expresión individual de este maravilloso universo. Todxs somos polvo de
estrellas y lxs verdaderxs constructorxs de nuestra existencia. Namaste
Quidam
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